En los climas cálidos y húmedos, un enemigo silencioso puede acechar: el dengue. Esta enfermedad viral transmitida por mosquitos puede pasar desapercibida en sus etapas iniciales, pero reconocer sus signos tempranos es vital para buscar tratamiento a tiempo y prevenir complicaciones graves.
Si bien no existe una vacuna contra el dengue, existen medidas preventivas clave que pueden reducir el riesgo de contraer la enfermedad. El uso de repelente de mosquitos, ropa protectora, la eliminación de criaderos de mosquitos y la instalación de mosquiteros son pasos importantes para protegerse a sí mismo y a su familia.
Aquí te presentamos una guía completa sobre los primeros síntomas del dengue y cómo actuar ante ellos. Los primeros síntomas del dengue suelen aparecer entre 4 y 10 días después de la picadura de un mosquito infectado.
Los síntomas más comunes son:
- Fiebre alta repentina, generalmente entre 39°C y 40°C (102°F a 104°F), que puede durar de 2 a 7 días.
- Dolor de cabeza intenso, generalmente frontal y de gran severidad.
- Dolor muscular y articular intenso que puede afectar todo el cuerpo.
- Náuseas y vómitos, que pueden ser leves o graves.
- Erupción cutánea roja con manchas pequeñas y planas, que aparece al tercer o cuarto día de la enfermedad y dura hasta una semana.
- Dolor detrás de los ojos que empeora al moverlos.
- Glándulas inflamadas en el cuello y las axilas.
En algunos casos, también se pueden presentar:
Cansancio intenso
Mareos
Pérdida del apetito
Diarrea
Es crucial prestar atención a los signos de advertencia del dengue grave, que pueden indicar complicaciones potencialmente mortales. Estos incluyen dolor abdominal intenso, vómitos persistentes con sangre, sangrado por la nariz o las encías, disminución de la micción, fiebre que baja repentinamente y piel fría y húmeda. Ante la presencia de estos síntomas, buscar atención médica inmediata es imperativo para un tratamiento oportuno que puede salvar vidas.
Reconocer los primeros síntomas del dengue es el primer paso para combatir esta enfermedad. Mantente alerta ante cualquier señal de malestar, especialmente si has estado en áreas donde el dengue es común. La detección temprana y el tratamiento adecuado son fundamentales para superar con éxito esta enfermedad y prevenir complicaciones graves.
