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Por la presión se revientan las tuberías y para repararlas se tiene que suspender el servicio de 4 o 5 horas
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ERIKA GONZÁLEZ/ REPORTERA
SAN BUENAVENTURA
Roturas causadas por empresa constructora que rehabilita red general de drenaje; fugas por presión en las líneas de conducción, además de las deficiencias en las válvulas sectorizadoras, dificultan la distribución de agua potable, informó el gerente del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (Simas), Rodolfo Salas Flores.
“Para reparar los daños, obligadamente tenemos que suspender el servicio de bombeo, en ocasiones por 4 o 5 horas, todo depende del tamaño de la rotura, eso, como es lógico genera molestia e inconformidad entre los usuarios, que con toda razón protestan, pero deben ser conscientes de que son cuestiones ajenas a nosotros, aunque el personal se esfuerza, muchas veces les resulta imposible realizar las reparaciones con rapidez, por lo cual pido comprensión de la ciudadanía”, expuso Salas Flores.
Las fugas de agua potable en las redes de distribución producen desperdicio de agua, reducen la eficiencia de las redes y generan una pérdida económica al organismo operador del sistema de administración.
“La detección de fugas en una red de tuberías es complicada, ya que no se encuentran visibles”, dijo.
Agregó que en plena temporada de calor, cuando los termómetros rebasan los 40 grados, el Simas recibe constantes reportes de fugas.
“De estos entre 15 y 17 son provocadas por la constructora, el resto son por el envejecimiento natural de la red, la cual está siendo renovada gracias al apoyo del alcalde Oscar Flores Lugo”, indicó.
Señaló que durante las semanas de mayor calor durante el mes de julio, se ha registrado un incremento en el consumo de agua potable y aunque tienen capacidad de suministro, el problema es la antigüedad de la tubería que revienta por diferentes causas, entre ellas la presión.
“Pero sobre todo por las labores que realiza la empresa que sustituye la tubería de drenaje”, comentó.
Salas Flores, acompañado por personal a su cargo, recorrió ayer los distintos sectores del Municipio para revisar la presión. “En algunos la presión era de un kilo, en otros, de 600 lo que nos obliga a revisar las líneas para detectar las fallas y corregirlas, con estas temperaturas, no podemos dejar sin agua a la población”, resaltó.
