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El sospechoso llamó esta madrugada a la policía y dijo que había sido secuestrado y le habían dejado junto a un centro comercial con un cinturón de explosivos manejado por control remoto
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VANGUARDIA / EL TIEMPO
BRUSELAS, BEL.- Un hombre con problemas mentales desató hoy una alarma terrorista en un centro comercial de Bruselas, y después admitió que la historia que contó a la policía era falsa, informaron las autoridades locales.
Según la fiscalía, el sospechoso llamó esta madrugada a la policía y dijo que había sido secuestrado y le habían dejado junto a un centro comercial con un cinturón de explosivos que se manejaba por control remoto.
A raíz de ello se realizó un gran despliegue con fuerzas especiales y artificieros.
El análisis del cinturón de explosivos reveló que este contenía sal y galletas. Tampoco hay indicios de que el hombre fuera secuestrado.
La persona que hizo la llamada fue detenida. Según dijo la fiscalía, se trata de un hombre nacido en 1990 que ya había llamado la atención en otras ocasiones por sus problemas mentales. La última vez que acudió a la policía sostuvo que había sido captado por la milicia terrorista Estado Islámico para viajar a Siria.
Durante un registro en la casa de la madre del sospechoso se pudieron hallar materiales con los que se había confeccionado el falso cinturón de explosivos. Al ser controfrontado con las pruebas, el hombre confesó que había inventado la historia del secuestro, informaron las autoridades.
La fiscalía ha solicitado el arresto del sospechoso por difundir información falsa sobre el peligro de un ataque, así como una evaluación psiquiátrica del detenido. Un juez decidirá el miércoles sobre el caso.
La alarma terrorista en Bruselas, desató una gran agitación en la capital belga. El primer ministro, Charles Michel, incluso acudió al centro nacional de crisis para seguir la intervención policial.
El pasado 22 de marzo se produjeron varios atentados en una estación de metro y en el aeropuerto de Bruselas, que costaron la vida a 32 personas. Desde entonces casi todas las semanas hay una gran operación policial.
Las fuerzas de seguridad belgas arrestaron el pasado fin de semana a 12 personas durante redadas antiterroristas. Tres de ellas, de 27, 29 y 40 años, quedaron detenidas bajo el cargo de intento de asesinato "terrorista".
