Agencias/El Tiempo
ZAPOPAN.- Luego de la sorpresiva derrota del jueves, México está obligado a ganar sus dos restantes encuentro y el primero será hoy sábado ante el subcampeón Puerto Rico plagado de estrellas y será el pitcher de los Medias Blancas de Chicago, Miguel González.
“Hace cuatro años no pude estar con la selección, porque me tenía que ganar un puesto en la rotación abridora de los Orioles de Baltimore.
Buck Schowalter me aconsejó que me debía quedar. Ahora tengo la fortuna de hacerlo ante el público mexicano”, expresó el nativo de Tepatitlán, de ahí su apodo del “Mariachi”. No puede ocultar su felicidad de jugar ante sus familiares que lo podrán ver en acción. “Se me enchina el pelo solamente de pensar que lanzaré por primera vez aquí con el uniforme de México”, agregó González.
El tener la gran responsabilidad de mantener con vida a la novena tricolor, no es una presión extra para el pitcher de los Medias Blancas.
“He tirado en situaciones con más presión en los playoffs en el 2012 y 14 cuando estaba con los Orioles. Aquí es totalmente diferente, estoy consciente de que represento a mi país y daré todo lo que esté a mi alcance”, mencionó el serpentinero derecho.
Después de presenciar los cuadrangulares que se dieron en el primer encuentro, habló de mantener la pelota abajo para evitar los batazos largos.
“Una pelota rompiente que se quede por el centro, corres el riesgo de no volverla a ver”. Miguel tendrá este año un manejador nuevo, Rich Rentería, quien fuera el anterior manejador nacional.
“Tiene mucha energía, quiere que el equipo se una. Estoy orgulloso de tenerlo conmigo, porque también es mexicano y siempre me dijo desde que llegó que vendría al Clásico y no quiero defraudarlo”.
