[image_slider]
[image_items link="LINK_IMAGE" source="http://periodicoeltiempo.mx/wp-content/uploads/2018/11/foto50-copia-2.jpg"] [/image_items]
[image_items link="LINK_IMAGE" source="http://periodicoeltiempo.mx/wp-content/uploads/2018/11/foto50a-copia-2.jpg"] [/image_items]
[image_items link="LINK_IMAGE" source="http://periodicoeltiempo.mx/wp-content/uploads/2018/11/lupe13-1aa-copia.jpg"] [/image_items]
[/image_slider]
[quote]Durante la audiencia, él sonreía. Le dieron 28 años y 50 mil de multa.[/quote]
Guadalupe Pérez/ReporteraA 28 años de prisión y el pago de 50 mil pesos, fue sentenciado Roberto Guadalupe Lerma Varela, quien el mes de septiembre del 2017, asesinara a su hijastro, el pequeño “Josecito” de tan sólo 3 años de edad, de entre 80 y 100 golpes con un palo o tabla, en el Municipio de Castaños, sólo porque se “hizo” en sus pantaloncitos.
El brutal asesinato ocurrió la media noche del 25 de Septiembre del 2017, en el hogar que habitaba con Rosa Angélica, “Josecito” y otro bebé de 2 años de edad.
Esa noche, “Josecito” se “hizo” en sus pantalones, lo que provocó la ira del padrastro, quien tomó un palo o tabla de alrededor de 92 centímetros de largo, y golpeó con saña al pequeñito, una y otra vez, hasta que los músculos de sus nalguitas, muslos, espalda y brazos, quedaran molidos, a la vez que le asestaba golpes en la cabeza y rostro mientras lo mantenía recostado en un sillón.
Sus muñecas y manos, también quedaron desechas, lo que mostró que en un principio intentó protegerse inútilmente.
“Ya papito, ya papito”, fueron las súplicas que repetía el pequeño José a quién consideraba su padre, pues Roberto era su padrastro.
Según la madre del pequeño, ella intentó parar la golpiza, pero Roberto amenazó con matarla, y el miedo pudo más que su naturaleza de madre.
Fue hasta que se cansó de golpearlo, que Rosa Angélica notó que los ojitos del menor estaban “extraños”, y finalmente los cerró.
Tras esto, lo llevaron a la Clínica 8 del IMSS, pero el pequeño ya no contaba con signos vitales.
Aunque el sujeto intentó convencer a la madre de mentir, que el pequeño había sido sustraído por hombres armados y le fue entregado golpeado; finalmente fue señalado como responsable.
Finalmente y para evitar llegar al juicio oral Lerma aceptó un procedimiento abreviado en donde la defensa de la víctima indirecta y el Ministerio Público, llegaron a acordar una pena de 28 años de prisión, además de 50 mil pesos como reparación del daño.
Tal pena deberá cumplirla en el penal de Saltillo y su condena se cumplirá el próximo 27 de septiembre del 2045.
Será el próximo 15 de noviembre cuando se dará lectura a la sentencia como parte del cierre este procedimiento judicial.
