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[image_items link="LINK_IMAGE" source="http://periodicoeltiempo.mx/wp-content/uploads/2016/04/Nota7A-1.jpg"] Los favoritismos siguen vigentes.[/image_items]
[image_items link="LINK_IMAGE" source="http://periodicoeltiempo.mx/wp-content/uploads/2016/04/Nota7-2.jpg"] Fueron mismos compañeros de Omar Arredondo quienes lo pusieron en la "cruz", mismo que se ostenta como Comandante regional.[/image_items]
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[quote]Mientras que nadie puede salir a comer, él lo hace, disfruta de una siesta y en patrulla oficial, mientras que la delincuencia está desbordada[/quote]
REDACCION/EL TIEMPOLos compadrazgos y favoritismos siguen vigentes dentro de la Policía Investigadora del Estado, y esto quedó en evidencia luego que un “ministerial” quien tiene cargo de Comandante operativo de la Región Centro, saliera a comer a su domicilio en horario de trabajo y en unidad oficial, acto que presuntamente tienen prohibido realizar los agentes por orden precisamente del Estado.
Fue la tarde de ayer cuando compañeros del detective Omar Arredondo lo pusieron en "la cruz" al dar a conocer que el agente, no sólo gozaba del privilegio de salir a comer, cosa que se les tiene prohibido a los oficiales, sino que se traslada a su vivienda en la Zona Centro, a bordo de la patrulla que tiene asignada, lo cual es un abuso.
Por si fuera poco, trascendió que éste disfruta de una siesta, lo cual puede hacer sin problema alguno, ya que el agente asignado como su pareja, le renta un departamento ubicado precisamente arriba del hogar de Arredondo, por lo que ambos tienen ese privilegio y se “tapan” uno al otro.
El uniformado estuvo poco más de una hora en su hogar y con la patrulla de color blanca, con logos de la PGJE, estacionada sobre la calle Ocampo, hasta que salió el agente después de disfrutar sus sagrados alimentos, mientras que la Ciudad se halla inmersa en una ola imparable de robos y asaltos, delitos que toca combatir precisamente a estos ministeriales.
Esta, como otras varias acciones han causado la inconformidad entre los agentes de la Policía Investigadora, quienes con dichos actos tienen claro que aún se tienen favoritismos entre los detectives, favores a los que la mayoría no tiene acceso, por las órdenes estrictas de parte de las autoridades estatales, mientras que los “privilegiados” no solamente salen a comer a sus hogares, sino que pueden hacerlo a bordo de una patrulla y con gasolina que debería ser utilizada para combatir los delitos que tanto afligen a los monclovenses.
