El agua alcalina mejorará su metabolismo, mejorará la salud de su hígado e incluso le ayudará a combatir el cáncer, al menos según sus seguidores. La verdad real, sin embargo, es mucho más mundana. Hay poca evidencia sólida sobre estas y muchas otras afirmaciones de salud asociadas al agua alcalina. y lo único en lo que es claramente mejor que el H2O normal es en ser más caro.
El agua alcalina es agua que ha sido tratada (a menudo mediante un ionizador) para tener un pH superior a 7, el pH normal y neutro del agua. (por pH, los científicos se refieren a la medida de cuán ácida o básica es una sustancia en una escala de 0 a 14). La premisa básica detrás del agua alcalina es que puede equilibrar un cuerpo que se ha vuelto demasiado ácido, especialmente al abordar la acidez. en nuestro torrente sanguíneo, reparando así una larga lista de condiciones de salud supuestamente relacionadas con la acidez.
Un problema importante con estas afirmaciones es que se han realizado muy pocas investigaciones para brindarles un apoyo, incluso marginal. Algunos estudios han sugirió posibles beneficios del agua alcalina, pero estos normalmente han implicado animales, placas de petri, o muy tamaños de muestra pequeños de voluntarios humanos. Y los exámenes a mayor escala no han arrojado muchos resultados, como una revisión de 2016 que no se pudo encontrar cualquier vínculo positivo entre beber agua alcalina o comer alimentos ricos en alcalinos y la prevención del cáncer o la mejora de los resultados del cáncer.
“La promoción de una dieta alcalina y agua alcalina entre el público para la prevención o el tratamiento del cáncer no está justificada”, dicen sin rodeos los autores de esa revisión. concluyó.
Dejando a un lado las pruebas, el muy logica La cantidad de agua alcalina es irregular en muchos sentidos. Para empezar, el cuerpo humano ya es bueno para garantizar que nuestros órganos y fluidos mantienen el pH que necesitan estar. Es uno de los muchos ejemplos de homeostasis o los complejos procesos biológicos que garantizan la estabilidad en un organismo vivo. El pH típico de nuestra sangre incluso ronda un poco por encima de 7, por lo que ya es ligeramente alcalino y puede criarlo por largos períodos de tiempo sería activamente dañino para nosotros.
Si bien existen condiciones médicas que pueden alterar este equilibrio, es poco probable que una gota ocasional de agua alcalina sirva de mucho para ayudarnos. En tal situación, dada nuestra biología, el agua que bebemos primero ingresa al estómago, que es muy ácido, por lo que se neutraliza rápidamente. Sería posible que beber grandes cantidades de agua alcalina podría aumentar notablemente el pH del estómago, pero esto sólo sería temporal, porque nuevamente, el cuerpo es muy bueno para asegurarse de que todo siga igual. Además, afortunadamente tenemos tratamientos que pueden abordar de manera confiable un problema cuerpo ácido cuando sucede (como los antiácidos para el estómago), por lo que no hay necesidad de tirar los dados sobre algo que ser casi ciertamente inútil.
