Los pacientes se van más enfermos de cómo llegaron y el personal sufre mientras trabaja, esto ocurre en la clínica del ISSSTE en donde no cuentan con la suficiente capacidad de aire acondicionado y se encuentran soportando la segunda ola de calor que azota a Monclova.
María Rosalinda Castillo Martínez, Delegada del sindicato relató que, hace poco tiempo lograron tener un poco más de capacidad en aire acondicionado, pero nuevamente una pieza del transformador volvió a presentar fallas y otra vez la mayoría de las salas, consultorios o áreas están sin ningún tipo de ventilador.
Problema. Según la delegada, un severo problema es que, en el área de farmacia, no tienen el servicio de aire acondicionado y es de los departamentos más calientes y por ende, el medicamento se caduca o simplemente se echa a perder debido al calor y, por lo tanto, ya no hace efecto al paciente.
Al haberse dañado el transformador la capacidad de energía es muy limitada y, por lo tanto, ni siquiera abarca con regularidad los aparatos con los que se cuentan en la clínica. Hoy en día son 250 empleados de base, suplentes y confianza además de los 100 o más pacientes diarios que acuden a alguna cita exclamo la líder sindical quien busca el bienestar de la planilla laborar.
Riesgos. Es por ello que exigen a las autoridades correspondientes una solución, ya que temen algún golpe de calor en los empleados o hasta la misma población enferma a quienes afirman se les están entregando medicinas que ya no están aptas para el consumo humano.
