El animalito fue diagnosticado incorrectamente con artritis y recibió una dosis equivocada de medicamento, lo cual empeoró su salud.
Una mujer compartió en sus redes sociales su mala experiencia en una veterinaria al sur de Saltillo el pasado 17 de abril, cuando llevó a su mascota para un servicio sencillo.
Paola Pardo expone la situación y explica que llevó a su perro a una veterinaria para un baño, corte de pelo y eliminación de garrapatas.
La dueña recogió a su mascota tal como le indicaron a las 19:30 horas, pero notó que el animal tenía problemas para moverse. La situación empeoró cuando, al llegar a casa, descubrió que las patas delanteras no respondían.
Decidieron regresar a la veterinaria, donde les dijeron que el perro tenía "artritis", una explicación que no convenció a los dueños, especialmente cuando el peluquero mencionó que ya no tenía movilidad antes de cortarle el pelo. A pesar de recibir medicación para el dolor, el perro no mostró mejoría.
El jueves pasado, el perro fue llevado a Lions Pet, una clínica veterinaria, donde después de un chequeo se descubrió que el perro tenía problemas en el sistema nervioso debido a una mala dosis de medicamento y una pata trasera desalineada.
Después de recibir el tratamiento adecuado por parte de los veterinarios, el animal está en proceso de recuperación; sin embargo, la dueña advierte a la sociedad en general que no se debe pasar por alto este tipo de incidentes.
"Así que sí, a mi perrito le lastimaron su patita y debido a la falta de atención del veterinario, le dieron la dosis incorrecta de la pastilla. Además, está encubriendo a los responsables, ya que no revisa las cámaras para ver lo que realmente sucedió. De hecho, ni siquiera está al tanto de lo que les dan y les hacen a las mascotas los empleados", concluyó Paola.
Este incidente resalta la importancia de la calidad del servicio en las clínicas veterinarias, y los dueños de mascotas siempre deben buscar alternativas confiables para el cuidado de sus animales.
