La Selección Mexicana de Futbol viene de sufrir un fuerte revés contra su acérrimo rival deportivo, Estados Unidos, en la Gran Final de la Concacaf Nations League llevada a cabo en Arlington, Texas.
El AT&T Stadium acogió el partido por el título que no suelta de las manos el equipo de Gregg Berhalter tras doblegar a la Selección de Jaime Lozano con otro dos a cero, que quedará en el historial de los partidos disputados entre ambas selecciones.
En dicho partido se esperaba que Santiago Giménez estuviera en el eje de ataque, no obstante el 'Jimmy' lo sentó otra vez al contar con Henry Martín como centro delantero, pero 'La Bomba' no recibió balones de Hirving Lozano y Uriel Antuna para mojar en la meta contraria.
'Chaquito' únicamente disputó 25 minutos en el 'Final Four'. En semis frente a Panamá se quedó en la banca y en la final ante Estados Unidos ingresó al minuto 65' por 'El Brujo' Antuna.
En la primera cita 'Santi' Giménez estalló por no ver participación, tan así que pateó una banca, mientras que en la segunda se ganó la tarjeta amarilla por fingir un golpe en el rostro que, en primera instancia, se señaló como penal hasta ser revertido por el árbitro tras asistir al VAR.
“EN MÉXICO POCOS SON PROFESIONALES”
Tras la derrota contra las Barras y las Estrellas, Santiago Giménez estuvo en entrevista con Jorge 'Burro' Van Rankin, de Caliente TV, para afirmar que en nuestro país el jugador mexicano «es poco profesional» a comparación de los futbolistas que militan en Países Bajos.
«Aquí (en Países Bajos) el ser profesional es algo normal, todos son profesionales aquí, en México son pocos los que son profesionales y esos son los que hacen la diferencia. Aquí (en Europa) no te alcanza con ser profesional, aquí necesitas ser profesional y más, si no, no te alcanza porque todos son muy profesionales, ellos se desviven por el futbol, llegan a las 8-9 de la mañana y se van a las tres de la tarde», explicó.
Santiago Giménez dio el salto al futbol europeo después de festejar el título de la Liga MX con Cruz Azul. El Club Feyenoord Róterdam le abrió las puertas al 'Bebote' para consagrarse campeón de la Eredivisie la temporada anterior.
